El Sábado 30 de diciembre viajé a Calama (dónde trabaja mi amado). El motivo era muy importante y poderoso así es que era absolutamente necesario viajar (más adelante les contaré de qué se trata). A pesar de no haberme llevado una buena impresión de esta ciudad cuando la visité por primera vez, me hice la idea de disfrutar y pasarlo lo mejor posible. Pero no tenía idea con qué "sorpresas" me iba a encontrar.
Resulta que el asunto empezó mal desde el principio, o sea, desde que puse mi armadito trasero en el asiento nº 9 del bus. A mi lado un señor que luego del "buenas tardes" de cortesía no paró de hablar en todo el viaje, es decir, me contaba acerca de su familia y sus nietos y su trabajo y el año nuevo y el calor y el desierto y tantas cosas más durante las casi 11 horas que dura el viaje. A mi me carga conversar cuando viajo y sólo le respondía con monosílabos al caballero. plop!
Más encima me fui para el lado del bus en donde me llegaba todo el sol. aunque cerré cortinas el calor era terrible...me caía la gota. plop!
Cuando llegué a Calama, me estaba esperando mi amado, feliz corrí a sus brazos pensando que pasaríamo el primer año nuevo juntitos (los anteriores siempre ha estado trabajando). Llegamos al hotel y me comencé a sentir mal, con mareos, dolor de cabeza, dificultad para respirar....me apuné y la tontera me duró casi toda la noche. plop!
Al otro día mi amado tenía que ir a trabajar (tenía turno de día), así es que tendría que arreglármelas sola durante el día completo hasta que llegara en la noche. Lo pasé pésimo. En Calama el centro no es muy llamativo, no hay mucho que mirar. Así que decidí irme a un ciber a matar el tiempo (por eso enchulé el blog), cuando me aburrí me fui al hotel a cagarme de calor. plop!.
Al otro día sería año nuevo, digamos que disfrutamos de la mini fiesta, y digo mini porque duró poquito ya que el 1 era día de trabajo. A las 2 a.m ya estábamos acostados. plop!
Cuando me levanté el primero de enero salí a recorreR la ciudad. Todo cerrado, sólo los cahuines estaban abiertos y obviamente no iba a entrar a uno de ellos. Los curahuillas brotaban del suelo, gallos peleando, mujeres gritando y yo caminaba muerta de miedo. Al rato se me acerca un borrachín, me pidió plata, me dijo si me podía casar con él y que por favor le diera el abrazo de año nuevo. Yo salí arrancando y el tipo me siguió, estaba aterrada. Encontré unciber abierto y me quedé allí, zambullida en el pc. plop!
Llamé por teléfono a mi amado y largué el llanto. ¡NO AGUANTO MÁS ESTAR SOLA EN ESTE PUEBLO!, discutimos y colgamos. plop!
Cuando llegó en la noche salimos a comer, pero para variar todo cerrado, para más remate peleando todo el rato y yo despotricando en contra de este pueblo minero. Tomamos un colectivo, mi amado que cierra la puerta y sentimos un frenazo en el que sólo pensé que moriría en Calama, y casi fue así, porque hemos recibido un tortazo que nos dejo medios atontados. Una mina nos chocó por atrás, como si supiera que yo no quería nada con esta ciudad. Por fortuna todos estamos bien, nadie salió mal herido (excepto los autos que quedaron como acordeón). Pero el susto ufffff. Se nos pasó todo el enojo y dimos gracias a Dios por estar aún con vida. Yo no quería morir allí. plop!
Al otro día por fín viajamos a mi Copiapito y nunca había estado mas contenta de volver a mi hermosa tierra.
Pienso en la posibildad de vivir allá y me duele la guata, a mi amado lo sigo hasta el infinito y más allá, pero Calama....¡Calama! definitivamente lo detesto.
pd: no quise ofender a nadie con la opinión que tengo acerca de Calama, lo digo con respeto.
"HAY COSAS BUENAS AÚN EN LO MALO, SÓLO OBSERVANDO SE PUEDE DISTINGUIR"
